Si has llegado hasta aquí es que en ti ya hay un cierto interés por la Ópera. Si aún no eres un completo enamorado de la lírica, te ofrecemos algunos consejos para ayudarte en el camino de aprender a amar la Ópera.
¿Qué es la Ópera?
La ópera es una forma de teatro con música. Lo que hace de la ópera una forma de arte escénico tan intensa, es la fusión de palabras y música para transmitir emociones. Los sentimientos que nos evoca la música, unidos a las palabras, son capaces de despertar en nosotros impresiones emotivas mucho más profundas que las palabras por sí solas.
Si la palabras nos transmiten lo literal, la parte racional del mensaje. La música es el lenguaje de los sentimientos.
En la ópera se dan cabida las emociones con que cada uno de nosotros convivimos en nuestra propia vida (celos, amor imposible, traición, amistad, conflicto deber-amor…) Eso hace que, identificándonos en los personajes y en las situaciones que estos atraviesan, podamos reconocer en ellos parte de nuestro yo más íntimo. En ese sentido la ópera puede ser un vehículo para conocernos a nosotros mismos.
Ese gran impacto emocional que es capaz de provocar, es lo que hace que hace que la ópera nos dé tantos momentos de disfrute intenso, y es lo que lleva a tantas personas en el mundo a enamorarse de este gran espectáculo.
¿Cómo empezar a escuchar ópera?
No es aconsejable iniciarse simplemente comprando una entrada para la siguiente ópera que se represente en tu teatro más cercano.
En primer lugar, no cualquiera es la mas indicada para iniciarse. Por otro lado, antes de disfrutar de una ópera se requiere algo de esfuerzo por tu parte. Previo a ir al teatro es preferible conocer la obra que se va a representar. Lo ideal es haberla «aprendido» antes. En otra palabras, conocer la historia y haber escuchado su música. Pero ese esfuerzo, te aseguro que se ve compensado con creces.
¿Cómo «aprender» una ópera?
Aprender una ópera te garantiza una fuente de satisfacción y disfrute, tanto en el teatro como en tu casa oyendo las fabulosas grabaciones que existen de cada obra.
El primer paso para aprender una ópera es conocer la historia, el argumento. Puede bastar con leer la sinopsis, o mejor aún leer el libreto. Puedes encontrar la sinopsis y el libreto en la mayoría de los estuches de los CDs. Raramente están traducidos al Español por lo que Internet es una buena fuente para encontrarlos.
El segundo paso es oír la música, dejarse llevar por los sentimientos que despierta, sin prestar atención a un análisis racional en un primer momento.
Oye la música conforme sigues el libreto, a ser posible bilingüe, de forma que puedas leer los textos en su versión original, para ser capaz de diferenciar los matices que cada cantante introduce en cada una de la palabras. Al entender el significado de éstas junto a la música asociada, podrás observar como lo musical va íntimamente unido a los versos, subrayando las emociones del personaje y aportándoles la dimensión emotiva más allá de la que conlleva las propias letras. Así en un dúo, o en un trío o en un cuarteto, gracias a la música podemos percibir las distintas emociones de cada personaje expresadas a un mismo tiempo ofreciendo posibilidades artísticas que el teatro hablado por si sólo es incapaz.
Paso a paso. Una vez tienes la ópera en CD y su libreto, sigue los siguiente pasos.
1. Lee la sinopsis del primer acto. Sólo la de este acto, para tenerla muy presente cuando empieces a oír la música.
2. Escucha el primer acto, leyendo al mismo tiempo el libreto. Fíjate en ambas la versión original y su traducción, de forma que poco a poco puedas ir asociando las palabras en idioma original a su significado. Conforme oyes y lees, imagina los escenarios, las situaciones y los personajes.
3. Lee la sinopsis del segundo acto, e inmediatamente después escucha el acto con el libreto.
4. Continúa así con cada acto.
5. La segunda vez que escuches la ópera vuelve a hacerlo con el libreto. Para esta vez serás capaz de reconocer pasajes musicales, y captar más detalles que no captaste en a primera escucha
Depende de cada persona, pero en general, a partir de la siguiente vez que escuches la ópera empezarás a obtener un mayor deleite de cada pasaje. Para disfrutar una ópera en el teatro, es recomendable seguir los pasos anteriores previo a ir al teatro. Obviamente no es necesario que todos los pasos los realices el mismo día. Tómate el tiempo que te sea necesario. Oír una ópera por primera vez siempre supone algo de esfuerzo, y es preferible dosificarse y oír cada acto poco a poco. Una vez la hayas escuchado un par de veces, descubrirás todo el placer que te puede proporcionar la Ópera.
¿Qué ópera escuchar primero?
No hay ninguna regla fija para comenzar por una parte concreta del repertorio a la hora de iniciarse en la ópera. Si embargo, para empezar a comprender la ópera sí hay obras en el repertorio que por su música, su estructura o su argumento son preferibles como primera escucha a otras que tal vez requieran un cierto conocimiento de elementos operísticos para apreciarlas en todo su valor.
La ópera que recomendamos para iniciarse es Rigoletto (en su defecto La Traviata). La razón es que estás óperas reúnen muchos de los elementos fundamentales que configuran el drama lírico tal y como lo entendemos hoy. Rigoletto presenta unos personajes muy marcados, que dan vida a un drama, donde la música juega un papel primordial. Es esta ópera como en ninguna otra anterior a su estreno, la música está íntimamente ligada a las situaciones dramáticas y se supedita a la consistencia del drama.
El orden que recomendaríamos para «aprender» óperas sería el siguiente. Proponemos dos alternativas para cada caso.
- Rigoletto / La Traviata. Elementos básicos la ópera como drama. Qué tipo de voces se asocia a cada personaje
- Tosca / La Boheme. Puccini. El drama lírico como un continuo musical sin interrupciones
- Lucia di Lammermoor / Il Trovatore. Ópera romántica (recitativo, aria, cabaletta)
- D. Giovanni /Le Nozze di Figaro . Mozart. Ópera clásica
A partir de ahí, las más grandes del repertorio (las seleccionadas en discografía recomendada) son un camino a seguir para amar la ópera.
Si llegas a sentir la pasión de la ópera, prepárate a vivir momentos memorables. Una vez que llegas a amarla, las oportunidades de seguir viviendo y descubriendo experiencias nuevas en ella no te dejarán nunca. A veces te sorprenderá algún pasaje en el que no habías reparado y que ahora, al coincidir con alguna vivencia propia reciente, cala en ti de forma especial. O descubrirás una nueva interpretación, o un matiz que antes no percibido, ahora te conmueve.
Si llegas a amar la ópera, ¡Enhorabuena! y ¡Bienvenido! Nos veremos en el teatro…
Fuente: Operamania