La bossa nova y sus orígenes

En este artículo expondremos el surgimiento de la Bossa Nova en manos de su creador, Joao Gilberto. Narraremos la verdadera historia de este género mundialmente conocido y aceptado por multitudes.

Muchos críticos han opinado que la bossa nova es una forma de rebelión a lo impuesto por la dictadura de Brasil en la década de los sesenta. Este último aspecto está muy alejado de la realidad del origen de este género.

JOAO GILBERTO Y SU REGRESO A RÍO DE JANEIRO

bossa nova

Joao Gilberto, en la década de los 50, ya en una ocasión había estado en Río de janeiro, intentando venderle a la radio, discográficas y músicos la idea obsesionante que tenía musicalmente en su cabeza. El artista, al no encontrar eco para su idea, decide regresar a su ciudad natal, Salvador de Bahía.

Al tiempo, el artista decide apostar de nuevo a la suerte, por lo que regresa a Río de Janeiro.

La gente de Río recordaba perfectamente a Joao, lo catalogaban de excéntrico, ya que se le veía siempre caminando por Río deambulando y con la mirada extraviada, con aire melancólico y hablando sólo, viviendo además de la buena voluntad de sus amigos, por lo que siempre cambiaba de casa, ya que no sabía ganarse la voluntad de la gente que lo acogía en su hogar.

joao gilberto

Pero si algo es de destacar de Joao Gilberto y su vida en Río era que tocaba la guitarra de día y de noche.

Joao Gilberto tenía todas las características de un creador por esencia, vivía obsesionado con su instrumento, la guitarra, que podía tocar madrugadas enteras y luego pasar el día durmiendo. El mal aspecto que Joao Gilberto tenía era debido a estos desórdenes de horario.

El aspecto físico del artista también se vió influenciado por la terrible obsesión que tenía sobre su instrumento y la idea musical intermitente en su cabeza, ya que llegó a parecer un indigente de largas barbas y pelo hasta sus hombros.

JOAO GILBERTO Y SU PARTO CREATIVO

Joao Gilberto tenía una paupérrima situación económica, y aún a pesar de eso se negó a tocar en boites. Al artista le parecía un ambiente muy ruidoso donde la gente hablaba fuerte y no determinaban a los músicos interrumpiéndolos. Sin embargo, estos sitios eran los primeros en promocionar nuevos talentos y experimentaciones rítmicas y de géneros, como es el caso del jazz.

Joao Gilberto estuvo viajando de una ciudad a otra en Brasil durante dos años, tratando de vender sus nuevas ideas a algún músico o productor interesado: Porto Alegre, Minas Gerais, Diamantina, Juazeiro o Salvador.

Estamos en el año de 1959 y el artista, cerca de su gran fracaso, experimenta el éxito más extraordinario de su vida.

EL ÉXITO DEL ARTISTA Y LA CIUDAD DE DIAMANTINA

Joao Gilberto se traslada a la ciudad de Diamantina, donde por cierto vivía su hermana, quién lo hospedó unos meses en su casa.

Estando en esa ciudad, el artista comienza a experimentar algo estelar. Pasaba todos los días tocando la guitarra, ya la gente comenzó a murmurar que había llegado un tipo raro que se mantenía encerrado y obsesionado con la guitarra. Pues la mayor sorpresa es que de esa obsesión saldría algo maravilloso. Joao Gilberto se encerraba con frecuencia por horas en el baño, y allí con la acústica existente podía modular la intensidad de su voz y el vibrato. Joao perseguía no sólo crear un género musical, sino un estilo vocal suave, nasalizado y carente casi de vibrado.

Joao gilberto y la bossa nova

Además, en la creación de su obra, el artista pretendía adaptar los registros del piano a la sonoridad de la guitarra, en especial la síncopa. Por lo que creó un nuevo estilo bossa nova, donde se producirían ritmo y armonía de manera simultánea, y éstas serían las bases del estilo.

TERCERA VUELTA A RÍO DE JANEIRO: IPANEMA

De regreso a Río de Janeiro, Joao Gilberto empieza nuevamente a tocar las puertas de músicos y productores para intentar grabar su nueva propuesta creativa, pero la conclusión era que él debía tocar en los boites para dar a conocer su trabajo.

El artista se oponía a que su trabajo se proyectara en esos lugares repletos de gente mal educada, donde había mucho ruido y donde además no respetaban a los artistas, sólo fue una sola vez para salir y nunca más entrar.

Mientras tanto, en el apartamento donde residía en Ipanema, Gilberto seguía con la obsesión de tocar la guitarra con el nuevo estilo bossa nova, de ritmo y armonía simultánea que había creado, y además adaptándole el nuevo estilo vocal.

Un vecino de Gilberto, quien era fotógrafo de la compañía discos Odeón, de nombre Chico Pereira, al escuchar una vez a Joao Gilberto, decide grabarlo y fue tan perfecto aquello que escucho, que de manera inmediata apoyó al artista con la compañía discográfica Odeón para que Joao Gilberto pudiese grabar su nuevo estilo, el bossa nova. Para lo cual hace que uno de los directores de la empresa, un tal Antonio Carlos Jobim, escuche el trabajo de Gilberto.

EL ENCUENTRO ENTRE JOAO GILBERTO Y TOM JOBIM

joao gilberto y tom jobim

Los dos músicos ya se conocían desde una reunión de músicos a la cual habían asistido. Tom Jobim vió muy mejorado el aspecto de Gilberto, ya que no andaba como un indigente con la barba y el pelo largo.

Seguido del encuentro, Gilberto tomó la guitarra y ejecutó dos de sus obras: Bim Bom y Hô-ba-la-la. La mayor impresión de Jobim fue ver la destreza que tenía Joao Gilberto en la guitarra, y la armonía tan moderna empleada en sus composiciones.

Antonio Carlos Jobim, impactado por todo lo que había escuchado, busca una obra que había compuesto con el poeta Vinicius Da Moraes, de título Chega de saudade, la cual quiso adaptar al nuevo estilo bossa nova creado por Joao Gilberto.

De aquí en adelante, comenzaría el despegue de Joao de la mano de Tom Jobim. Aquí ya podemos expresar que el parto ha finalizado, y acaba de nacer Joao Gilberto y su creación: la bossa nova.

Fuente: Lacarne Magazine

¡Muchas Gracias Por Votar!

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

error: El contenido está protegido !!
Scroll al inicio